Desde el estado
anímico a sueños y planificaciones futuras. Entérate de los efectos de este
evento y cómo canalizarlo.
Este fenómeno astronómico y
astrológico, se manifiesta cada cierto tiempo, mostrando cuánto su energía
puede llegar a intervenir en nuestra vida. Si bien, siempre han sido asociados
a aspectos negativos, como causar daño a embarazadas o producir catástrofes, si
nos basamos en los astros afectados, ellos sí podrían interferir en nuestra
vida.
Cuando ocurre un eclipse, se abre un espacio
para soltar lo viejo, creencias, actividades, rutinas que nos están asediando y
empezar un nuevo camino, Más bien es una invitación a tomar decisiones, a
consolidar proyectos que hemos estado planificando hace un par de meses.
El eclipse de ayer 21 de agosto,
cierra un proceso de crecimiento espiritual que está marcado por “atrevernos” a
elegir. Es así, como todas las propuestas que tenemos en nuestra cabeza desde
enero de 2017, ya deberían tomar forma.
La astrología da cuenta que nos
afecta en el amor, trabajo y personalidad. Supone que nos da la energía
suficiente para sacar adelante cosas que se encontraban sólo como un deseo, pero
que ojo, hemos trabajado y necesitamos transformar.
Como este evento toca a los
signos de Leo, Tauro Acuario y Escorpión, ellos serán los más afectados,
sintiendo especial desarmonía en sus vidas, notablemente en temas amorosos. La
duración de los cambios que se estarán produciendo será de un año, por lo que
deben estar preparados para que el piso se mueva de forma un poco más fuerte.
Siempre se recomienda (antes y
durante el eclipse), descansar, consumir mucha agua, relajarse y esperar la
manifestación de todo. En el caso de tener una piedra de cuarzo, y que el
eclipse sea lunar, se debe dejar en un recipiente de agua mezclada con sal. De
esta manera nos ayudará a transformar las potentes energías que se están
manifestando durante el evento.
Terminar con la resistencia y
seguir dando pasos valientes, es la invitación que hace este fenómeno
astrológico.